domingo, 5 de junio de 2011

Teleferico Avila-Macuto






































































Siempre he dicho, en todo lugar que visites mira bien, fíjate bien y pregunta; en muchas ocasiones e visitado el gran Cerró Ávila, ahora llamado Wuarairarepano y cada vez que recorría sus caminos veía con entusiasmo visitar la antigua línea de teleférico Caracas-Macuto.
Galipán es visitado por muchos caraqueños al igual que turistas del interior del país pero todos van a lo mismo, visitar sus restaurantes, merenderos y miradores, otro importante grupo también lo visita pero haciendo recorridos en Tracking por el Picacho, Lagunazo y sus diferentes atractivos ocultos. En esta ocasión visitamos la línea dos del complejo de teleférico, Humboldt-Macuto.
El primer día lo dedicamos a conocer la estación del Iron, está estación se ubica muy cerca del Merendero, vía El Rinconcito, en ella se puede observar un conjunto de rieles y tensores de guayas, al igual que varios funiculares, todo este lugar está totalmente abandonado, pero ese mismo abandono lo hace muy interesante, ya recorriendo sus diferentes rieles se nota lo complejo del sistema, aquí los pasajeros se podían quedar para visitar el poblado de Galipan, seguir hacia Macuto o retornar al Humboldt. Curioseando este lugar encontramos una gran fosa donde desciende el contra peso que tensa las guayas, algo realmente impresionante, una gran cantidad de bloques de concreto aun cuelgan de las antiguas guayas ejerciendo una gran presión al sistema.
Luego de un par de horas en el lugar recorriendo sus caminerías, torres y estructuras retornamos al merendero para degustar los tradicionales Sándwich de Pernil y dirigirnos hacia la Posada Miradas, lugar donde pasaríamos la noche para al siguiente día visitar nuestro segundo objetivo, la estación Loma del Caballo.
Nuestro segundo día de visita comienza por un sendero poco delimitado, para acceder a este hay que pedir permiso a varias casas ya que se encuentra dentro de algunas propiedades, este sendero está totalmente oculto, no posee ningún tipo de señalización, lo poco que queda de él es por el uso de los lugareños o de algunos visitantes, es un recorrido de aproximadamente hora y media de descenso hasta la estación.
Al arribar a la estación se encuentra una gran torre y muy cerca de ella se puede ver un funicular guindando de la guaya, en este lugar se puede ver que este fue lanzado desde la estación por algunos ociosos, ya que está lleno de escombros y cauchos viejos, desde la lejanía se puede ver la torre pero no se aprecia el gran tamaño que tiene hasta que te montas en ella, la estación se encuentra en mejores condiciones que la Iron, esto seguro es porque su acceso no es fácil, esta estación duplica en tamaño a la anterior, posee dos cabinas de mandos donde hay muchos instrumentos y maquinarias interesante, muchas caminerías aéreas desde donde se pueden ver los juegos de poleas aun con las guayas, desde este lugar hay una especie de mirador donde se obtiene una estupenda vista del litoral central, de igual manera hay muchos funiculares guindando en los andenes, otros ya están ocultos por la vegetación, en este lugar también hay una construcción que funcionaba como taller de reparaciones de los funiculares, todo esto en total abandono.
En nuestro recorrido encontramos una puerta con unas escaleras que descendían hacia la oscuridad, no lo pensamos dos veces y entramos, aquí nos llevamos una gran sorpresa al encontrar una gigantesca sala de maquinas, aun están tres motores pero desbalijados seguramente por algunos recolectores de aluminio y cobre, ver todo el complejo te lleva al pasado y lo imaginas operativo, es realmente impresionante ver todo el sistema de refrigeración, escape, ventilación, suministro de combustible, un gran complejo para dar electricidad a todo el sistema de teleférico. En este lugar también están las habitaciones de los operadores, baños, depósitos, todo esto debajo de las dos torres donde se tensan las guayas. La estación tenía un área social, una gran terraza, seguramente con algunas mesas para que los visitantes disfrutaran de la vista que ofrece la montaña y el litoral, esta estación era el último tramo para descender hasta la Estación Macuto, ya en el litoral.
Esta visita personalmente me pareció muy buena por el gran valor histórico que posee, pero es lamentable que no funcione nada de esto, y seguramente pasaran muchos más años para que lo haga, yo pienso que por lo menos lo deberían recuperar y dejarlo como un museo, sería una buena opción para visitarlo y observar como esta construcción al pesar que está totalmente en abandono aun están sus guayas, poleas, torres y funiculares en pie, eso quiere decir que todo esto es de una muy buena calidad.
Los invito a ver Días de inauguración del Teleférico Caracas-Ávila-Macuto, en yuotube, muy bueno.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Un gran libro sobre esto maravilloso teleferico
http://www.funivie.org/documenti/Teleferico_de_Caracas_ESP.pdf

Anónimo dijo...

Ese teleférico... nunca fue rentable... y sin el casino, el complejo Ávila Mágica o Waraira Repano como lo quieren llamar estara condenado al fracaso, Sanabria lo advirtió, el haber construido el hotel Humboldt sin el casino lo condeno a ser deficitario y poco atractivo, tanto para el gobierno como para cualquier empresa privada de mantenerlo, no es rentable y es díficil mantenerlo sin descuidarlo. Ojalá eso lo entendiera el gobierno y retome los planes que tenía Ávila Mágica, ellos si estaban claros lo que necesitaba el hotel y habian tomado en cuenta consejos del fallecido arquitecto de construir el casino el cual el gobierno le nego los permisos y ahí esta... como todo en este país, a la mitad, lleno de elefantes blancos, ruinas. Mérito tuvo la desaparecida Inversora Turística de Caracas, ellos lograron levantar el teleférico contra viento y marea, lástima que el gobierno les hizo la vida imposible...

Anónimo dijo...

Un error grande de Perez Jimenez el no haber construido el casino que proyecto Sanabria que sería la fuente de ingresos para mantener a flote el hotel Humboldt y sus 2 teleféricos. Hasta el día de hoy, ningun gobierno ha tratado de corregir el error y la empresa ITC que fueron los unicos en corregirlo los expropiaron sin imdemnización ni nada, fue injusta esa expropiación, ellos hicieorn bien su trabajo meintras estuvo decadas en obras el viejo teleférico Caracas-Avila sin éxito y miles de millones de $ malversados por no usar la gente adecuada para levantarlo, por torpeza (en este caso no de corrupción sino de malas decisiones).

Anónimo dijo...

por 5ta vez "prometen su modernización"... pero sigo dudando, ante 1 año económico muy pésimo, ni siquiera el estado tiene divisas para insumos médicos, vas a las clínicas, no hay material para radiografías, vas a un automercado, no hay leche, no hay aceite y ¿van hablar de recuperar esto? ¡por favor! ¿cómo demonios van a financiar este teleférico? ¿si hasta el ferrocarril la Encrucijada se paro porque le deben 1500 millones de $ a las 3 contratistas italianas? cuesta creerlo, es un chiste...